En la actualidad, cada uno habla de lo suyo, aparentando seguir lo que nos dicen los demás, pero en realidad tenemos la cabeza puesta en nuestros propios argumentos.
“La naturaleza le ha dado al hombre un par de oídos y una sola lengua, para que pueda escuchar el doble de lo que habla”.
El saber escuchar no es una cualidad propia de nacimiento, sino que se adquiere con el paso del tiempo, poniéndonos en el lugar del otro y sabiendo el por qué de sus palabras, es decir, entendiéndolo. Entender no es sinónimo de compartir; más bien hace referencia a respetar y comprender la postura del otro.
Para poder escuchar atentamente es fundamental la presencia del silencio, ya que si el emisor está hablando y nosotros lo hacemos paralelamente, además de interrumpirlo, sólo podremos oír lo que nos dice sin comprender el sentido de sus palabras.
Bronca, impotencia, disgusto, es lo que sentimos cuando no podemos comunicar lo que queremos. Yo creo que el punto no está en no saber explicarnos, sino en no saber escuchar. http://www.novarevista.com/psicoego/No_Entiendes_Nada_De_Lo_Que_Te_Digo_1.html
La base de una buena comunicación no sólo está en la escucha sino también en la observación hacia aquella persona que se dirige a nosotros.
Hoy en día no disponemos del mínimo tiempo para atender a lo que nos dicen, por más breve que sea. Todas las personas deberíamos poner en práctica las dos herramientas fundamentales de la comunicación: la capacidad de ponernos en el lugar del otro y la capacidad de decir lo que pensamos y sentimos, sin agredir.
Por lo tanto, si deseamos escuchar atentamente debemos tener en cuenta algunas de las siguientes sugerencias:
- Hablar menos y escuchar más. No escuchamos si estamos hablando.
- Concentrarnos en las palabras y en los gestos del emisor.
- No interrumpamos a los demás cuando estén hablando.
- Miremos a los ojos al otro en señal de que le prestamos atención.
Algunos beneficios de saber escuchar:
- Eleva la autoestima del que habla. La comunicación se hace más fluida, respetuosa y agradable.
- Se reducen los conflictos por mala interpretación.
- Se aprende de los conocimientos del otro.
- Amplía el marco de referencia, cultura e intereses del que escucha.
- El que escucha con atención, refleja una imagen de respeto e inteligencia.
A TODOS NOS GUSTA SER ESCUCHADOS…PERO, ¿SABEMOS ESCUCHAR CUANDO NOS HABLAN?
Melina Raberto
La verdad meli esta muy bien pensado el posteo que hiciste. Cuantas veces se escucha que hay q aprender a escucharnos, y es verdad. Pensamos siempre en lo que vamos a decir sin importar lo que el otro diga, ya que sólo queremos expresar lo nuestro. No sólo hay que escuchar al que esta dirigiéndonos la palabra para quedar bien y para que no diga que no le importa lo que nos dice sino es también como vos dijiste por respeto hacia el otro. No digo que hay que mostrar interés y agrado a lo que nos dicen pero simplemente ESCUCHAR. Además si no nos escuchamos la conversación se torna como una obligación o una rutina a seguir y no una situación de amistad o respeto hacia el otro. Una vez más meli muy bien pensado el posteo porque de alguna forma "encaja" con la realidad que vivimos.
ResponderEliminarJuan Baita