Padre leyéndole un cuento a su hijoMientras que durante las primeras épocas la gente en su mayoría no sabía leer y la publicación era escasa; hoy los libros son de fácil acceso, ya que contamos con grandes librerías, bibliotecas, talleres literarios, ferias del libro, etc., y por lo menos en gran parte del mundo la gente esta alfabetizada y capacitada para interpretar la lectura.
Pero aunque parezca una contradicción cada vez son menos las personas que dedican parte de su tiempo a la lectura.
En primer lugar debemos tener en cuenta que la lectura es una hábito que vamos adquiriendo desde pequeños y debería prolongarse a lo largo de nuestra vida.
En la actualidad muchos padres prefieren que sus hijos estén mirando televisión o jugando en la computadora, que sentarse con ellos y leer un libro juntos. Pero no se dan cuenta que están cometiendo un grave error, ya que la lectura abre su mente a un mundo increíble, su vocabulario se enriquece, su redacción e imaginación mejora y además crea hábitos de reflexión.
Actualmente la mayoría de los adolescentes casi no leen, ya que siempre la lectura está asociado con lo que se “tiene que estudiar” para las materias. Debido a esto los chicos creen que los libros son aburridos, una pérdida de tiempo, demasiado extensos, pero no se dan cuenta del placer que da la lectura, ya que les permite vivir aventuras, y sentirse parte de ellas como si fueran los verdaderos protagonistas.
En el caso de los adultos, salvo los que lograron el hábito de leer, los demás suelen poner como excusa la falta de tiempo ya sea por el trabajo, las tareas cotidianas, la crianza de los hijos, no encontrar el libro adecuado, etc. Y así para muchos adultos la lectura de los libros termina junto con la escolarización.
Realmente creo que es una pena que cada vez haya menos personas, que se interesen en la lectura, dado que los conocimientos que se adquieren a través de la misma son invaluables, no hace falta viajar para sentirse en lugares y culturas desconocidas, nos ayuda a viajar a través de la historia o leer por el simple hecho de divertirse sin tener que buscar una comedia en la tele.
Por eso sería maravilloso que todas las personas, sin tener en cuenta la edad, tomen conciencia de la importancia que tiene un libro, y le dediquen diariamente un tiempo a la lectura.
"De ahora en más cuando abras un libro sabrás que cada página tiene algo especial y quizá ese libro que hoy comenzás a leer relate una hermosa historia para atesorar en el recuerdo."
Pero aunque parezca una contradicción cada vez son menos las personas que dedican parte de su tiempo a la lectura.
En primer lugar debemos tener en cuenta que la lectura es una hábito que vamos adquiriendo desde pequeños y debería prolongarse a lo largo de nuestra vida.
En la actualidad muchos padres prefieren que sus hijos estén mirando televisión o jugando en la computadora, que sentarse con ellos y leer un libro juntos. Pero no se dan cuenta que están cometiendo un grave error, ya que la lectura abre su mente a un mundo increíble, su vocabulario se enriquece, su redacción e imaginación mejora y además crea hábitos de reflexión.
Actualmente la mayoría de los adolescentes casi no leen, ya que siempre la lectura está asociado con lo que se “tiene que estudiar” para las materias. Debido a esto los chicos creen que los libros son aburridos, una pérdida de tiempo, demasiado extensos, pero no se dan cuenta del placer que da la lectura, ya que les permite vivir aventuras, y sentirse parte de ellas como si fueran los verdaderos protagonistas.
En el caso de los adultos, salvo los que lograron el hábito de leer, los demás suelen poner como excusa la falta de tiempo ya sea por el trabajo, las tareas cotidianas, la crianza de los hijos, no encontrar el libro adecuado, etc. Y así para muchos adultos la lectura de los libros termina junto con la escolarización.
Realmente creo que es una pena que cada vez haya menos personas, que se interesen en la lectura, dado que los conocimientos que se adquieren a través de la misma son invaluables, no hace falta viajar para sentirse en lugares y culturas desconocidas, nos ayuda a viajar a través de la historia o leer por el simple hecho de divertirse sin tener que buscar una comedia en la tele.
Por eso sería maravilloso que todas las personas, sin tener en cuenta la edad, tomen conciencia de la importancia que tiene un libro, y le dediquen diariamente un tiempo a la lectura.
"De ahora en más cuando abras un libro sabrás que cada página tiene algo especial y quizá ese libro que hoy comenzás a leer relate una hermosa historia para atesorar en el recuerdo."
Noelia Cardozo
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